Mientras el país comenta el documental de Netflix que trajo nuevamente a escena el crimen de Fernando Báez Sosa, todos parecen haber olvidado que en Santiago del Estero ocurrió un homicidio similar, pero el peso de la justicia no fue el mismo. Los magistrados locales sentenciaron a 3 años de prisión en suspenso a los rugbiers que mataron a golpes a Román Paz González. Historias parecidas, diferentes finales.

