Las causas por presunto lavado de dinero que involucran al financista Maximiliano Vallejo, principal patrocinador del fútbol argentino, golpean directamente en el corazón del poder de Claudio “Chiqui” Tapia. Una trama de préstamos millonarios, criptomonedas, casas de cambio y clubes en crisis que ahora ponen al presidente de la AFA bajo una presión sin precedentes.

